La Naturaleza no entiende de calendarios.
Y mi terraza ha decidido que ya es primavera.
Aún en pleno invierno, estos días de sol alegran mis macetas. Y ellas a mi.
Estas espinacas ya avisan para que busquemos pasas y piñones.
Y hasta los cactus más viejos y cascarrabias se han apuntado a una maravillosa floración.
Y aquí, las recién llegadas.
Parece que les gusta el sitio.